jueves, 11 de octubre de 2018

KATHELEEN HANNA /


Estreno sección de temporada y le he preparado una de las habitaciones principales del Hotel Chelsea a Katheleen Hanna. Fundadora del grupo Bikini Kill y del movimiento Riot Grrrl. Activista y feminista. Una mujer con una imagen dominante, poderosa y punk. Icono de los 90. Fue un rayo de luz entre la multitud. Infundía la revolución en todas y en todos,y lo hizo con sus letras y cantando. Cambió a un montón de chicas creando un nuevo rol. Un modelo de mujer que podía ser sexy, duro, enojado y divertido; y todas esas cosas a la vez.




Lo cuentan muy bien en el documental The punk singer(2013) que usando una combinación de entrevistas y secuencias de archivo incluyendo actuaciones en vivo de la banda ,traza la vida y la carrera de Katheleen Hanna. Desde su educación un tanto problemática, contándonos su comienzo en las performances poéticas y su activismo feminista.

Katheleen Hanna empezó siendo spoken word pero en un taller de escritura su profesora Kathy Acker le pregunta: ¿por qué quieres escribir?, y Hanna le contesta: pues porque nadie me ha escuchado en toda mi vida y tengo muchas cosas que quiero decir. Acker le da el mejor de los consejos: entonces, tal vez, deberías estar en una banda y no haciendo spoken word porque la gente va a ver grupos de música y no va apenas a los spoken word. Y Hanna se fue a casa y empezó a montar una banda.

Desde pequeñita quería ser una especie de artista pero ella no sabía de qué tipo. Su madre y ella tuvieron una relación muy específica, la madre era sádica pero divertida y recuerda una anécdota que la marcó: cuando su madre se enteró del típico juego de la confianza en el que una persona se deja caer de espaldas confiando en que la otra la sujete. Su madre en el juego no la recogió y cuando calló de culo la madre se rió y le dijo que eso le serviría para no confiar en nadie, ni siquiera en su propia madre.

Estudió fotografía y ya en sus primeros estudios se fijaba en trabajos feministas, inspirada por Barbara Kruger y Jenny Holzer. Y en uno de sus primeros trabajos trató sobre el sexismo y fue censurado por la universidad. A causa de esto monta con sus compañeras de la universidad Reko Muse, siendo un espacio para el arte feminista con el que entraron en un nivel muy elevado de conciencia feminista.En esa misma etapa se junta con cuatro amigas y monta Bikini Kill querían hacer una revolución. 

Eran muy jóvenes, sin apenas experiencia pero con mucha energía. Recibieron desde el principio toneladas de atención aunque les daba igual la atención y el dinero. Tenían una misión, feminismo visto desde la perspectiva del punk rock y cuestiones políticas. 







Lo transgresor fue que ella en los conciertos hablaba directamente a las chicas para así conectar con ellas; y eso fue realmente necesario y parte del éxito.Era la primera vez que había una mujer en el escenario por completo enojada, agresiva y haciendo cosas que estás acostumbrado a ver a los chicos. En el documental se comenta que sin Bikini kill hubiésemos estado muertos culturalmente. 
Kathy en los conciertos pedía que las chicas estuvieran al frente, cerca del escenario. Los hombres podían estar en el local pero sin dominar el ambiente. Eso era una vuelta de guión y explotó en las mentes de la generación alternativa. Ellas querían esa parte de la historia que se les vetaba en todas la época grunge. Y en todos los conciertos llamaba a todas las mujeres y las incitaba a ponerse delante para que ellos no las aplastasen y no las agobiaran. Si había una fila de chicas protegiendo el escenario todas estarían a salvo. Daba ordenes, instrucciones a los chicos y eso fue revolucionario en un escenario a lo que no se estaba acostumbrado.
Ella cantaba enojada, sus letras eran profundas y no era nada común a como una mujer tan joven debería actuar. Muy cruda. Buscaba romper las normas de lo que una mujer debería ser; y no ser la chica perfecta.

Kurt Cobein fue muy amigo de Kathellen Hanna. Estaba muy conectado con ella y con lo que estaba haciendo. Se dice que Kurt Cobein salió del art-punk feminista. Y conectaron mucho, se hicieron muy amigos en una época que se necesitaban.
Se comenta en el documetal una anécdota en la que Courtney Love le dio un tortazo estando en los bacstage en un concierto en Lollapalooza. Esa situación a Kathy Hanna le resulta muy triste yle violentó porque siendo feminista y queriendo ser aliada de las mujeres y no enemiga se tiene que enfrentar con una historia así.

Ella lucha contra los chismes que se intentan fomentar entre mujeres para enemistarnos y cambiar el rol aunque haya sido desde principios de los tiempos. Quería romper la dinámica tóxica de preguntarle a una mujer sobre otra para intentar sacarle otra cosa mala y después sacar un artículo enemistándolas.

Para combatir esto empieza Riot grrrl, a finales de los 80 principios de los 90. Necesitaba un motín femenino y se junta a Molly Newman, Bratmobile, Jen Smith y Tobi Vail para crear un espacio seguro en el que se pudiera reproducir música, realizar fanzines y proyectos. Hicieron una primera reunión en una casa en Washinton DC, teniendo muy claro que el espacio fuera solo para mujeres,sin hombres pululando por allí, para así poder hablar de asuntos comunes, darse y compartir información juntas. Hicieron un manifiesto y lo llamaron Riot grrrl con la idea de que se pudiese difundir y utilizar en cualquier país, sin derechos de autoría. Simplemente para ayudarse entre ellas e intentar reconciliarse con muchos extremos que hay en todas nosotras.









Kathlen Hanan cambió de tercio en cuanto a la manera de representarse como mujer feminista. Utilizaba toda su sexualidad en el escenario pero con las botas de combate. Decía: ¿Tú me vas a definir? ¿Vas a definir lo que soy?


Después de Bikini Kill monta un disco en solitario ella con una maquina de mezclas en una habitación de su casa. Algo también muy significativo y transgresor. Sonido Lo-Fi y mezclas sonoras tipo collage. Do it yor self. 




Después de este disco que tiene muy buenas críticas monta otra banda Le Tigre. Y cuando llevan un tiempo de gira se empieza a encontrar realmente mal y finalmente tiene que dejar de hacer lo que más le gusta en este mundo poniendo de excusa que ha dejado de sentir la música, y en realidad es porque está muy enferma y no tiene el control de su cuerpo por una enfermedad que le terminan diagnosticando en 2010 como la enfermedad de Lyme, ya en una etapa tardía. Tiene que llevar un tratamiento muy severo para combatirla y eso la impide llevar su vida de artista.


A día de hoy sigue haciendo música y haciendo gira con Le Tigre y vive con la enfermedad y el tratamiento  heroicamente. 

Adjunto el podcast de la sección Hotel Chelsea en el programa radiofónico Carretera Perdida. Min 42:24








Empatizo hasta el extremo con ella cuando termina en el documental diciendo que hay cierta posición de que cuando un hombre dice la verdad, es la verdad. Y que cuando una mujer, como mujer al decir la verdad se siente como si tuviera que negociar de cómo será percibida. Siempre hay una sospecha rondando a las mujeres, esa idea de que estás exagerando la verdad.
Hay que irse y rodearse de las mujeres que te crean. Le importa una mierda lo que piensa la gente. Ella sabe que es real. No le importa si la gente lo cree así. El el feminismo es importante porque sabe que es importante y no le importa si la gente no lo cree. Esa gente que se aleje de su camino.









viernes, 21 de septiembre de 2018

¿Quién ocupará nuestra habitación después de nosotros? Robert llegó mientras yo estaba terminando de escribir un poema, quizá fue el último que escribí en nuestra habitación 1017 del Chelsea Hotel.
No te peines, me dijo: te voy a hacer una foto. A Robert le fascinaba mi figura mística que ni yo misma sabía si era de hombre o de mujer, rozando el punto inexplorado de la androginia. Estaba fascinado por mí y no paraba de fotografiarme con su sencilla Polaroid. En aquellos tiempos las chicas debían ser sexys, pero ni a mi mente ni a la lente de Robert nos importaban esas mismas definiciones. 
Esta foto corresponde a esa etapa. Las fotos resultaban provocadoras y contestatarias, acorde con mi discurso y la letra de mis canciones y poemas, especialmente en lo referente a los estereotipos de género.
Cuando éramos niños(Patti Smith).





domingo, 11 de marzo de 2018

LEONORA CARRINGTON /

Leonora Carrington tiene reservada su habitación en Hotel Chelsea. Fue una mujer fascinante, enigmática y su vida fue surrealista. Pintora, escritora y pionera del surrealismo que vivió en México durante casi setenta años. Fue una rebelde toda su vida; simplemente por cuestionar lo que se esperaba de ella, todo lo ponía en duda y lo investigaba.




Desde su infancia en Inglaterra se rebeló contra las restricciones que conllevaba ser la única niña entre varios hermanos varones. Durante la adolescencia se rebeló contra las normas de las monjas y en consecuencia la expulsaron dos veces del colegio.
Cuando sus padres quisieron poner en práctica lo que ambicionaban para ella que era: primero ser una joven de sociedad decorativa y luego, ser una esposa obediente. Se rebeló de nuevo y huyó a Londres.
Allí deslumbró a los surrealistas en la década de 1930, formó parte del movimiento y estuvo presente en un momento cumbre del arte del siglo XX en el París de la preguerra, poblado de personajes como Pablo Picasso y Marcel Duchamp, Salvador Dalí y Man Ray, Joan Miró y Francis Picabia y Max Ernst. Allí su arte creció en ese torbellino creador.
La mayoría de estos nombres de hombres son inmortales, mientras que ella(al menos fuera de México) supone poco más que una nota a pie de página en la historia del arte. Pero eso a Leonora le daba igual, se rebeló de la visión que tenían de ella como femme-enfant, como musa. Y el gran atractivo de Leonora reside en su negativa a ser la musa de nadie.
Joan Miró en una ocasión le dio dinero para que fuera a comprarle cigarrillos y ella le devolvió el dinero diciendo que fuera el mismo.
También en México años más tarde se rebeló contra la concepción machista latina de cómo deben comportarse las mujeres.
Cuando llegaron los hijos se rebeló contra cualquier noción según lo que la maternidad exigía y produjo sus mejores obras en pleno caos doméstico, pintando con un bebé en la mano y el pincel en la otra.
Y de una forma gloriosa se rebeló contra la fórmula que le habría ayudado a convertirse en una artista consagrada, enemistándose con importantes mecenas y galeristas y negándose a conceder entrevistas o a dejarse fotografiar para periódicos y revistas.
Nunca había buscado ni necesitado fama ni atención. Era la antítesis del artista que persigue al mundo de galeristas y coleccionistas.
Se rebeló también contra la idea de un hogar estable o cómodo dejando varios matrimonios a medias.
Y por último, se embarcó en su última rebelión: contra la vejez a la que que no permitió debilitarla.

Para profundizar en su vida, recomiendo el libro que acaba de publicar la Editorial Turner "Una vida surrealista" de Jonana Moorhead. http://www.turnerlibros.com/book/leonora-carrington-2478.html



Leonora Carrington nació en 1917 en Inglaterra en una familia acomodada, privilegiada y unida. Le mandaron a los mejores colegios e internados donde la expulsaban de uno detrás de otro. Después debutó en Sociedad en la corte donde le organizaron un baile en el Ritz y después, se fugó y se esfumó escapando teatralmente de un gran salto a Europa.
Renunció a todos estos privilegios con solo veinte años. Nunca había buscado complacer a los demás; no perdía el tiempo en eso y pensaba que le apartaba de las cosas importantes de la vida,que era serle fiel a la curiosidad sobre las ideas y sobre el arte.
En Londres conoció al pintor Marx Ernst y se enamoraron al instante. Podríamos decir que tuvieron un flechazo surrealista. Los sueños, la libre asociación y técnicas como la escritura y la pintura automática fomentando el flujo espontáneo de palabras, pensamientos e imágenes propio de los surrealistas les unió. Hablaban el mismo idioma. De un mundo que se mueve entre mundos. El mundo de los sueños y la imaginación.
Están en plena eclosión del movimiento surrealista y su grupo de amigos más cercanos e íntimos son la fotógrafa Lee Mileer,Man Ray, Andre Bretón, Pablo Picaso, Salvador Dalí, Marcel Duchamp y todos terminan viviendo en París.
Los cuadros de Leonora transportan a otro mundo extraño. Con criaturas equinas flotando y bailando por unos paisajes de otro mundo. Con pájaros,gansos elegantes, patos y golondrinas. Sus pinturas son mundos insólitos y de apariencia siniestra. Campos de cielos rojos y montes de color ámbar donde desfilan personas con túnicas blancas.
La vida en pareja duró un año. Leonora había llegado a una conclusión esencial sobre ser mujer y artista : si se quedaba con Max, éste le empequeñecería. Sería un elemento más en el cuadro de su vida. 
Pero las circunstancias políticas(recordemos que estamos en el año 1940 y el avance nazi era imparable sobre Francia) fueron las que finalmente destruyeron el idilio amoroso. Leonora empieza a tener un “síndrome de guerra”. Perturbada, físicamente disminuida, mentalmente debilitada,fue ingresada por sus acaudalados padres en una clínica psiquiátrica de Santander. legó allí con brote psicótico, con delirios, alucinaciones y comportamientos paranoicos. Estaba medicada y atada de pies y manos. Se diría que con tanta medicación se trataba de una locura forzada
Y entra en catarsis . Los recuerdos de aquellos días están recogidos en un relato autobiográfico titulado Memorias de abajo. Que narra dos viajes, uno es la huida de Francia a España, y el otro el viaje de la cordura a la locura. Un texto fundamental en la historia del surrealismo. Es la historia contada desde dentro de una crisis nerviosa y una grave enfermedad mental en la línea de La campana de Cristal de Sylvia Plath y Más allá del cristal de Antonia White. Contando lo que se siente al perder el sentido de la realidad.
Con la escritura Carrington exorcizó sus males y finalmente salió de allí. De nuevo dio esquinazo a su familia y se fue a Lisboa y de allí a Nueva York donde de nuevo se encontró con el grupo surrealista ahora exiliados: Peggy Guggenheim, Piet Mondrian, la fotógrafa Berenice Abbot. Estamos ya en el año 1942 y Peggy Guggenheim, tuvo la rompedora idea de organizar una exposición en su propia galería llamada “Treinta Mujeres” con obras de Frida Kahlo, Leonor Fini, Meret Oppenheim y Leonora entre otras.
Después de esto Leonora se fue a México, se fue a el mundo mágico de los Mayas donde se había promovido una política de puertas abiertas con los refugiados europeos en especial con intelectuales y artistas  de ascendencia española. Allí conoció a la pintora Remedios Varo y a la fotógrafa Kati Horna y entre ellas creció una amistad cómplice. Leonora y sus amigas habían hecho un cambio radical. El suyo es un surrealismo que no se había cultivado antes, ya no eran simples musas. Leonora, Remedios y Kati llevaron el surrealismo a un nuevo territorio, un nuevo territorio centrado en la mujer y en el instinto.
Leonora fue ecofeminista y new age mucho antes de que se inventaran estos términos. Era feminista de una forma instintiva e inflexible y sentía preocupación natural por el entorno y por el hecho de que el planeta estuviera siendo maltratado por la llamada “especie inteligente”.
La igualdad de hombres y mujeres era algo que daba por hecho, algo que no podía creer que a principios del siglo XXI tuviéramos que seguir luchando por conseguir.
Nuestra historia ha sido tan manipulada que nos resulta difícil limaginar algo que no sea el patriarcado en que vivimos, y sin embargo Leonora estaba decidida a intentarlo.
Leonora fue una aventurera y la vejez la llevaba como un reto para ella era una aventura más que había que vivir. Con ochenta y nueve años seguía siendo la guerrera de siempre y la batalla a la que se enfrentaba era una aventura más, la más dura de su vida. La muerte.

Falleció a los 94 años en México.







Adjunto el podcast de la sección Hotel Chelsea en el programa radiofónico Carretera Perdida. Min 19:01



domingo, 17 de diciembre de 2017

VIRGINIA WOOLF /

Hotel Chelsea abre sus puertas y cede una habitación propia a  Virginia Woolf.  Sin duda Virginia Woolf tendría su habitación propia en el mítico Hotel Chelsea.
Virginia Woolf en el ensayo “Una habitación propia” (1929), plasmó sus opiniones, reflexiones y sus preguntas acerca de la desvalorada figura de la mujer en el arte y la literatura a principios del siglo XX, analizada desde el incipiente movimiento feminista. Una habitación propia es un imponente alegato feminista. Es un mito del feminismo.

  “Pero, me diréis, le hemos pedido que nos hable de las mujeres y la novela. ¿Qué tiene esto que ver con una habitación propia? Intentaré explicarme. Cuando me pedisteis que hablara de las mujeres y la novela, me senté a orillas de un río y me puse a pensar qué significarían esas palabras...”

 Virginia Woolf afirmaba en su ensayo que una mujer debe tener dinero y una habitación propia para poder escribir novelas.

 Su brillante ensayo contiene algunas de las consideraciones más inteligentes y chispeantes que se han dicho nunca sobre el papel de la mujer en el mundo y justo cuando se está produciendo la mayor revolución social de todos los tiempos: la equiparación de mujeres y hombres ante la ley. Las Sufragistas.

 Por medio de una falsa conferencia una escritora que ofrece ante unas jóvenes estudiantes sobre el tema de “las mujeres y la literatura”, recrea toda una experiencia imaginaria, vívida y humorística, que plantea algunas de las ideas más inteligentes y de apariencia más sencilla sobre el darse cuenta de las mujeres de su lugar en el mundo. Resulta una charla muy irónica y afilada pues tan solo hacía nueve años que se le había concedido el voto a la mujer.
 Woolf indaga en el papel que la mujer ha desempeñado en la historia del arte siempre dominada por hombres; y también analiza el movimiento feminista del que formó parte a principios del siglo XX. Su discurso es una defensa apasionada e implicada de los derechos de la mujer y una particular contribución literaria a la emancipación femenina y esto, claro, levantó opiniones polémicas. Muy de actualidad todavía.   Woolf critica los prejuicios a los que debe hacer frente como novelista, aborda las condiciones en las que han vivido las mujeres a lo largo de los siglos y cómo la discriminación y la pobreza han afectado a su creación artística.
 En carretera perdida somos virginianos y le regalamos una habitación a Virginia Woolf.

  «…Y se produjo la mayor liberación de todas, que es la libertad de pensar en las cosas tal como son» .




  Quizás una mente puramente masculina no pueda crear, pensé, ni tampoco una mente puramente femenina. Pero convenía averiguar qué entendía uno por «hombre con algo de mujer» y por «mujer con algo de hombre» hojeando un par de libros. Desde luego, Coleridge no se refería, cuando dijo que las grandes mentes son andróginas, a que sean mentes que sienten especial simpatía hacia las mujeres; mentes que defienden su causa o se dedican a su interpretación. Quizá la mente andrógina está menos inclinada a esta clase de distinciones que la mente de un solo sexo. Coleridge quiso decir quizá que la mente andrógina es sonora y porosa; que transmite la emoción sin obstáculos; que es creadora por naturaleza, incandescente e indivisa. De hecho, uno vuelve a pensar en la mente de Shakespeare como prototipo de mente andrógina, de mente masculina con elementos femeninos, aunque sería imposible decir qué pensaba Shakespeare de las mujeres. Y si es cierto que el no pensar especialmente o separadamente en la sexualidad es una de las características de la mente plenamente desarrollada, cuesta ahora muchísimo más que antes alcanzar…”



Adjunto el podcast de la sección Hotel Chelse en el programa radiofónico Carretera Perdida. Min 23:00 
https://www.ivoox.com/carretera-perdida-85-el-testimonio-virginia-audios-mp3_rf_22695094_1.html




sábado, 4 de junio de 2016

MARGARET KILGALLEN /





 


Descubrí a la artista visual Margaret Kilgallen viendo el documental Beautiful Losers(2008)de Aaron Rose. El documental habla de un grupo de artistas que desde la década de 1990 comienza un  arte urbano utilizando la estética de arte Lowbrow: un movimiento underground puramente Do ityourself. Arte urbano, skateboardinggraffiti y música.
La característica principal de este movimiento que surgió en la zona de Los Angeles en California a finales de la década de 1970 es su sentido del humor. Con un aire alegre y desenfadado,irónico y sarcástico; muy fino. Representado en su mayoría por medio de graffitis y pinturas murales.
 En Beautiful Losers hablan del trabajo y la carrera de un grupo de artistas; entre ellos: Shepard Farey, Harmony Korine, Geoff MacFretidge, Margaret Kilgallen... 
 Margaret Kilgallen destaca entre ellos y todo en ella resulta inspirador: su obra,la temática de su trabajo, su estilo y técnica, sus palabras. Es un artista que reivindica la belleza de hacer las cosas imperfectamente, con las manos. Y creía que no era simplemente caer en la pura nostalgia de admirar algo que está en desuso, sino darse cuenta de que el progreso, a pesar de traer elementos positivos, también barre otros que habiendo sido innatamente nuestros están alejándose poco a poco de nuestra naturaleza.
 Le gustaba pintar imágenes de mujeres que encontraba ejemplificantes y que consideraba heroínas. Heroínas como ella misma acabó siendo pues murió en el 2001 a los 33 años por una enfermedad.
 A Margaret le gustaba fijarse en personas que no todo el mundo conocía. En mujeres que hacían cosas pequeñas y sin embargo a ella le tocaban el corazón.Era aficionada a tocar el banjo y a la música tradicional americana y eso la llevó a interesarse por la obra de las pioneras del folk.
 Al principio ella compraba los discos y no tenía imágenes de esas mujeres. Y las dibujaba como ella pensaba o se imaginaba que eran que eran.
Retrató a MATOKIE SLAUGHTER, una bajista pionera a la que homenajea dibujando sus perfiles en los vagones de tren que también interpretaba en sus dibujos y murales.
Dibujó a la nadadora FANNY DUBACK que ganó en 1912 las Olimpiadas. Le llamó la atención como iba vestida con un traje de baño entero de lana. Ganó la competición porque ninguna de las demás sabían nadar a crol y esa es la técnica que ella utilizó.


Cuando se deprimía y no sentía que quería seguir haciendo e incluso  pensaba en renunciar, lo que la mantenía en marcha era el hecho de que tal vez alguien pudiera aprender e inspirar con lo que ella hacía.

 "Cuando expones tu trabajo y alguien se te acerca y te agradece por hacerlo, es algo muy especial. Cuando personas jóvenes se acercan y agradecen, esa es la razón por la que seguía haciendo su trabajo".

Ella quería inspirar a mujeres jóvenes porque frecuentemente se pone mucho énfasis en lo bonita y delgada que se es y no tanto énfasis en todo lo que se es capaz de hacer o lo inteligente que se es.
Le gustaba cambiar el énfasis en lo que es importante cuando se mira a una mujer. 






Adjunto el podcast de la sección Hotel Chelsea en el programa radiofónico Carretera Perdida. Min 07:00


sábado, 30 de abril de 2016

TRACEY EMIN /


Hoy en Hotel Chelsea le preparo una habitación a Tracey Emin. Artista británica que apareció en la escena de los noventa conocido como Young British Artist (YBA). 
La editorial Alphadecay publicó en el 2016 su libro de memorias "Strangeland" donde la artista británica se muestra a través de unos textos muy poéticos, directos y sensibles. Es un relato muy íntimo e interesante de su vida y trabajos.
El arte de Tracey Emin es llamado confesional. Donde vida y obra son indisolubles. Puede parecer de personalidad exhibicionista por la explotación de su biografía pero haciendo una observación detenida de su arte revela un mundo poético muy auténtico que es capaz de transportar al observador a su propia vida y a sus propios problemas.
Uno de sus trabajos más conocidos, de los más famosos y a la vez  más polémicos es My bed(1998), una instalación de su propia cama, con las sábanas arrugadas y manchadas. Todo desordenado y revuelto. En el suelo botellas de vodka vacías, cigarros y ceniceros repletos, condones y ropa interior. Esto desvela abierta e intencionadamente promiscuidad sexual, excesos de alcohol y drogas.






Tracey Emin cuenta que tuvo una crisis nerviosa en su apartamento y no se levantó de la cama durante cuatro días. Su piso quedó hecho un desastre. Y pensó: "¡Oh, Dios mío!¿Qué pasa si me muero y me encuentran aquí? ¿Y qué pasaría si todo esto no estuviera aquí, sino en otro lugar? ¿Cómo se vería entonces?" Y en ese momento lo vio claro y le pareció una idea brillante: Convirtió su cama en una instalación. Y lo define como "un autorretrato, pero no un autorretrato al que la gente le gusta ver". Esto me recuerda al onirismo autobiográfico de Frida Kahlo o al exhibicionismo conceptual de Sophie Calle y su obra Los durmientes.  
Volviendo a Tracey Emin,fue nominada para los premios Turner por dicha instalación y aunque finalmente no lo ganase, un famoso galerista Charles Saatchi vio su valor y le dio fama  convirtiéndola en una personalidad distinguida de la Royal Academy of Arts británica. 



Es importante recordar que todo esto era en los años noventa. Se podría decir que era toda una provocación y algo visionario ya que estábamos antes de la era facebook, instagram, del selfie y de toda la exhibición del Yo y de la hipervisivilad en las redes sociales. Las mujeres empezaban a alzar la voz de una manera muy activa, como las Riots girls. Tracey Emin hizo suya la exhibición de la intimidad como espectáculo. Entrelazando continuamente lo individual y universal, lo íntimo y lo público.


Otra de las obras a destacar: 

(Personas con las que me he acostado entre 1963- 1995)



En las paredes interiores de una tienda de campaña estilo iglú, cubiertas de letras recortadas de colores vivos tipo patchword que componían los nombres de todos aquellos que habían compartido el lecho de la artista durante ese período. Incluyendo su propio nombre: Conmigo misma, siempre yo misma. Nunca olvidando.. Además, la tienda traía a la memoria la alegría de las vacaciones cuando se es adolescente con inquietud nómada.
La palabra escrita es frecuente en el arte de Emin. Bordados o tubos de neón. Los bordados recuerdan otra de las pioneras del Arte confesional Louise Bourgeois o también de nuevo a Frida Kahlo.

(Exploration of the Soul 1994). 


Tracey Emin realizó un viaje en automóvil por Norteamérica leyendo fragmentos de un libro suyo en distintos lugares, sentada en una silla cubierta de bordados. En una especie de auto investigación literaria entre una confesión sincera y una puesta en escena estética. 
Su carrera es atípica y visionaria; es famosa una entrevista que concedió en televisión un año antes, completamente borracha, de la que luego no recordaba nada.
En cuanto al libro me parece muy acertada la estructura narrativa y poética . La autobiografía está divida en tres apartados, etapas de su vida por así explicarlo. 
Motherland” “Fatherland” y “Traceyland” que se corresponden con infancia, adolescencia y madurez. Ternura,sordidez y sosiego. Esto a su vez se relacionan con: traumas, violación y alcoholismo. En los países Gran Bretaña, Turquía y Nueva York.
Problemas económicos, desamparo vital, orígenes multiculturales.



"Cuando nací, creyeron que estaba muerta. Paul llegó primero, diez minutos antes que yo. Cuando tocó el turno, salí sin grandes complicaciones: pequeña,amarilla y con los ojos cerrados. No lloré. Porque en el momento de venir a este mundo tuve la sensación de que se había cometido un error. No pude chillar ni llorar ni presentar alegaciones. Me quedé inmóvil, lamentando no poder volver al sitio del que venía".




Strangeland es de vital importancia para el feminismo contemporáneo y además para el arte en general. Y está escrito desde la voz de una artista ya consagrada, mujer desde su madurez.
Investigando sobre ella, descubrí que en 1995 la artista fundó su propio Museo. Tracey Emin Museum en Londres. En un apartamento alquilado en Waterloo Road donde se presentaron una variedad de obras.
A medio camino entre museo y galería, entre apartamento y tienda de recuerdos. El museo representa una alternativa a los medios habituales para exponer arte. Es decir, una forma dinámica de comunicación para dirigirse al espectador activa y directamente. A través de la confesión personal, como todo el conjunto de la obra de Emin.

Adjunto Podcast en programa Carretera Perdida Sección Hotel Chelsea Min 9:49. 



viernes, 9 de octubre de 2015

KIM GORDON /


La chica del grupo tiene su cuarto reservado en Hotel Chelsea y con ella estreno sección en el programa radiofónico Carretera Perdida. 
La chica del grupo es el libro autobiográfico de Kim Gordon (Editorial Contra).Kim Gordon cuenta en este libro sus memorias e inquietudes músicales y artísticas de diferentes modalidades. Música, arte, pintura, instalación e interpretación. Kim Gordon fue la bajista y vocalista de una de las bandas de rock alternativo más influyentes de la historia, Sonic Youth.
Ella misma empieza a contar un tanto dramática en las primeras páginas del libro de cómo Sonic Youth se va a la mierda y deja de existir el grupo. Grupo que formaron ella y su marido Thurston Moore a principios de los 80. Tras 30 años dieron el último concierto en Sao Paulo, Brasil.En ese último concierto ya no se hablaban y según cuenta lo de ellos había fracasado.




Kim Gordon resulta opaca, misteriosa, enigmática o incluso fría. Con una infancia marcada por su hermano que tenía una enfermedad mental y siempre ha vivido con una sensación de no haberse sentido nunca protegida, ni por sus padres ni por su hermano mayor enfermo. Arrastra siempre la sensación de que ninguna de las personas cercanas le escuchaban en serio.
Se considera sumamente tímida y sensible. Cerrada hasta el extremo que para superar su propia hipersensibilidad no tuvo más remedio que ser valiente. Y para ello desde hacía veinte años ocupaba el centro del escenario.
No se considera música. Sí, con sensibilidad para el sonido, con buen oído y con gusto al juego visceral y la excitación que supone estar sobre un escenario. Siempre anhelando la sensación de electricidad y sonido mezclados arremolinándose desde la cabeza hasta las piernas.



Se pasa la adolescencia intentando equilibrar el arte con la música, la música con el arte, una cosa o la otra, un ir y venir. Rodeada de pintores, fotógrafos, músicos. Dan Graham (fotógrafo),la artista feminista Barbara Kruger,el norteamericano Raymond Pettibon que hizo las portada del disco de Blag Fag y un largo etc.





Tal vez sea ese el motivo por el que, para mí, la página, la galería y el escenario se convirtieron en los únicos lugares donde podía expresar y representar mis emociones sin problemas. Eran los espacios donde yo podía manifestar sexualidad,enfado,falta de preocupación por lo que pesara la gente. La imagen que mucha gente tiene de mí de ser una persona indiferente, impasible o distante no es más que un personaje que surge del tormento que padecí durante años cada vez que expresaba un sentimiento. Cuando era joven, nunca tuve un espacio en el que pudiera ser el centro de atención sin que esta fuera negativa. El arte, y el ejercicio del arte, era el único espacio exclusivamente mío en el que podía ser cualquier persona y hacer cualquier cosa, en el que, solo con usar la cabeza y las manos, podía llorar,reír o cabrearme”.


La música de Sonic Youth es rara y disonante. Un rock experimental que fue muy influyente en aquella época. En el libro va narrando disco a disco en forma de capítulo. Para alguien que no conozca la música de Sonic Youth esta autobiografía es una buena forma de adentrarse y conocer sus discos y trayectoria.

Al final del libro te da la sensación de que has conectado bastante con ella pues se muestra muy humilde en sus relatos y bastante vulnerable. Empatizo absolutamente por las conexiones artísticas. 




Adjunto Podcast en programa Carretera Perdida Sección Hotel Chelsea Min 04:20 
https://www.ivoox.com/carretera-perdida-14-club-lectura-del-audios-mp3_rf_8879592_1.html